Uno de los principales motivos por los que estudié, ejerzo y enseño el Derecho es mi ilusión de hacer de la sociedad mexicana una colectividad caracterizada por la consciencia jurídica.
Siguiendo a Niklas Luhmann (cuyos principales postulados integran el curso de Sociología que imparto en la Escuela Libre de Derecho) cuestiona por qué la evolución hacia la Modernidad ocurrió en Europa y no, por ejemplo, en China o India.
En los siglos XII o XIII —dice el sociólogo—, la tecnología, la difusión de la escritura y el bienestar hablaban en contra de Europa. Sin embargo, el avance se debió a que, sobre la base del Derecho Civil Romano, el Viejo Continente poseía una cultura jurídica muy avanzada en la que el Derecho se integraba al día a día de su población.
De esta idea de Luhmann concluyo que la cultura jurídica es fundamental para el desarrollo de los pueblos.
Sueño con un México que sustente su crecimiento en el Derecho; un México cuyos habitantes observen las normas por convencimiento en lugar de obedecerlas por coerción o de soslayarlas por desidia. Sueño con un México en el que la norma forme parte del saber común de las personas.
Se trata de una cumbre difícil de alcanzar, considerando que México ocupa hoy el lugar 99 de 126 países calificados por World Justice Project en respeto por el Estado de Derecho.[1]
Por eso construí este blog. Mi intención es que a través de su contenido, conformemos entre todos un espacio en el que las distintas experiencias de estudiantes, practicantes, docentes e interesados en el Derecho se combinen y ayuden en la construcción de ese país que ansío.
Es por esto que este blog, como el Derecho, es de todos y para todos.
Contáctame para conocer un poco más de mi labor como abogado de empresas y formador de nuevos abogados.
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Gibrán Miguel
[1] World Justice Project. WJP Rule of Law Index 2019, en https://goo.gl/Jh89N2 consultado el 28 de febrero de 2019.